Emprendo una nueva aventura, un nuevo reto deportivo pero
sobre todo personal y emocional.
El próximo 17 vuelvo a tierras jacobeas, vuelvo a iniciar el
Camino de Santiago, esta vez en su ruta portuguesa, partiendo desde territorio
luso y esperando alcanzar la gloria que espera en el pórtico de la catedral de
Compostela en 5 exigentes etapas.
Hace 7 años ya hice por vez primera el camino y fue una
experiencia única que deseaba repetir. Entonces, mi situación personal era
delicada y aquel camino francés sirvió para depurarme interiormente y sanar
bastantes heridas. Aquel camino marcó “mi camino”, y lo que hoy en día poseo y
disfruto personal y laboralmente se lo debo a aquella aventura en septiembre de
2010.
Ahora vuelve a llegar a mí la oportunidad de repetir la
experiencia, llevaba años buscando el momento, bastante tiempo recibiendo
señales, y quizás sea ahora más que nunca, por todos los acontecimientos que me
han tocado vivir en las últimas semanas y por los que están por venir en los
próximos meses, el momento adecuado para emprender “mi camino” y disfrutar de
esta experiencia vital y extraordinario viaje.
5 etapas, más de 150 kilómetros, 3600mD+/-, 2 países y una
meta.
Etapa 1
Ponte de Lima (POR) – Valença do Minho (POR):
33,700 Kms.
Etapa 2
Valença do Minho (POR) – Redondela (ESP): 34,400
kms.
Etapa 3
Redondela (ESP) – Pontevedra (ESP): 19,600 Kms.
Etapa 4
Pontevedra (ESP) – Padrón (ESP): 39,700 kms.
Etapa 5
Padrón (ESP) – Santiago de Compostela: 23,700 kms.
Todo la información de este camino, el día a día, las
etapas, curiosidades, etc., las compartiré en mis perfiles de redes sociales,
principalmente en twitter (@sevifernandez_) e Instagram (@sevifernandez_), así
que si quieres saber que tal me va todo por tierras jacobeas y desearme
#buencamino estaré eternamente agradecido.
El jueves 22 de junio espero llegar a la Plaza de Obradoiro
con el objetivo cumplido, llevo un día de comodín en caso de imprevisto aunque
prefiero emplear ese día en disfrutar de la capital gallega con un buen
alvariño y una merecida mariscada.
Este camino hasta hace un mes simplemente lo planteaba como
una nueva experiencia personal, deportiva y con el “matiz religioso” que
conlleva alcanzar la indulgencia plenaria al terminar la ruta jacobea, ahora, y
tras el repentino fallecimiento de mi padre, adquiere un enfoque totalmente
distinto a lo anteriormente citado y alcanza otro nivel de motivación, de
emoción y de deuda con alguien que me transmitió muchos de los valores que hoy
en día reflejo, una persona que me enseñó a amar el campo, la montaña y la
naturaleza, un amante de Galicia y su tierra, y un fiel devoto del apóstol
Santiago, patrón España y de nuestra bandera.
Este camino va por ti papá, “buen camino” a ti también allá
donde estés…
Sevi Fernández.